En primer lugar, el pescador novato debe saber que la pesca es un arte que difícilmente se encuentra regida por algunos parámetros fijos.
La actividad de la pesca puede variar según a diversas condiciones de acuerdo a climas, regiones, especies a capturar y otros factores medioambientales, etc. Es más, para cada una de estas variaciones se pueden emplear diversas metodologías de captura, pero ello ya depende del análisis del pescador.
El pescador novato debe prestar atención a uno de los factores que todo buen pescador observa y analiza, se trata de la temperatura del mar. Esta característica es la que rige o afecta los gustos alimenticios de los peces. Por ejemplo, el agua templada es la mejor oportunidad para las picadas pues aletarga a los peces. Por otro lado, el agua muy fría puede ocasionar que los peces busquen menor alimentación. De esta manera, entonces puede indicarse que la mejor época para la pesca son los meses templados, salvo excepciones de determinadas especies de peces.
Importancia es observar el oleaje, sea por mar o viento, ya que es un factor de significancia para la pesca. Los oleajes interesan porque son los responsables del movimiento de la superficie y del fondo, y por ello no resultará agradable que el pescador intente atrapar algo en una zona muerta de actividad de peces.
El pescador novato tiene que saber en días anteriores tempestades se detecta una bajada de presión y con ello los peces incrementan su actividad y son las mejores ocasiones para pescar. No obstante, días siguientes de las tempestades los peces son difíciles de capturar.
En realidad no hay nada definido en la pesca, lo que la hacen diferente son los pescadores pues emplean variedad de técnicas, las mismas que los novatos aprenderán con el tiempo.